Consejos para hacer compost
El compost o el abono es fundamental para tus plantas y para tu jardín. Si sos principiante o te gustan las plantas y querés empezar tomá nota de estos consejos fáciles para hacer abono y que no te resulte algo tedioso.
El compost o abono está lleno de nutrientes vitales ya que es la descomposición de los residuos utilizables en un recipiente o una pila y después se incorpora el producto acabado en el suelo para mejorar el contenido orgánico que servirá como alimento para las plantas. Si utilizás el mantillo alrededor de los árboles y los arbustos o plantas de interior para enriquecerlo, te darás cuenta cómo tus plantas pueden ganar mucho y estar más sanas.
Tené tu propio recipiente para el abono
Podés usar materiales nuevo o recuperados para poder crear tu recipiente para el abono como bloques de cemento o de plástico. Un tacho de basura también puede servir como lugar para crear tu abono y además es más manejable y fácil de limpiar. Cualquier material que utilices tendrás que asegurarte que sirva para poder realizarlo, para ello deberás agujerear la parte de arriba, los laterales y/o la zona baja para permitir que entre el aire y que se acelere la descomposición.
Tené palets de madera a mano
Los palets de madera pueden ayudarte para poder construir un buen compostador de material orgánico. Podés ensamblarlos como cubos sin tapas ni fondos. Colocá la estructura en un rincón discreto de tu jardín y creá por lo menos dos compartimentos: uno para los nuevos residuos y el otro para batir el abono descompuesto y para su uso.
Improvisar con bolsas
Las bolsas de plástico también pueden ser una buena forma para crear tu propio abono orgánico. Sólo tenés que hacer unos veinte agujeros en la bolsa con unas tijeras, rellenar con material y atar la parte superior. Dejá la bolsa en el sol para que el calor permita la rápida descomposición. Sacudí o gira la bolsa de vez en cuando para que todo se vaya mezclado. Después, llevá el abono terminado al jardín en una carretilla y usalo nada más sacarlo de la bolsa.
Triturá los materiales
Si triturás los materiales orgánicos será más fácil que se descompongan que si por el contrario son demasiado voluminosos. Antes de poner materiales en el recipiente de compostaje es mejor ayudar a que el proceso se acelere cortando por ejemplo los extremos del brócoli, los corazones de manzana, las mazorcas de maíz, las cáscaras de cítricos y otros desechos de cocina. Después utilizá una picadora de carne para triturarlo todo. También podés quemar madera en la chimenea y añadirlas al abono.
Evitá los productos de origen animal
Es necesario que evites todos los productos de origen animal excepto las cáscaras de huevo. Ente los materiales que puedes aprovechar están: restos de verduras, hortalizas, frutas, las conchas de los moluscos, los corchos de vino, los chicles, las cáscaras de nuez, las bolas de algodón, los restos de café o té, etc.
Poné hojas secas encima de la capa del abono
Si ponés capas de hojas secas encima del abono (aunque también puedes poner paja, heno o virutas de madera) podrás aumentar la descomposición y que las moscas no se acerquen. Este truco es ideal para esconder los olores y que los insectos no vayan a tu hogar atraídos por el abono.
Mové el abono de manera regular
Si movés el abono de forma regular proporcionarás oxígeno para que los organismos que inducen a la descomposición actúen más rápido. Un pequeño rastrilo es una herramienta perfecta para realizar esto.